¿Existen las personas tóxicas?

Las personas tóxicas son aquellas que arruinan la vida de los individuos que tienen más cerca con su negatividad. Suelen robar la autoestima, la autoconfianza y la energía; la exposición prolongada a este tipo de personas puede acabar con la salud y bienestar del que los padece. Hay que tener en cuenta también, que estas personas no actúan igual con todo el mundo, pero sí que existe una clara tendencia hacia la ponzoña. Pueden ser narcisistas, controladoras, envidiosas, celosas, manipuladoras, muchas veces carecen de amigos y se distancian de los familiares o se dedican a malmeter para distanciar a otros. No respetan, porque no se respetan. No aman porque no se aman. En ocasiones, subyace alguna enfermedad mental, pero, otras veces, es sólo el tipo de conducta que han adoptado, y, afortunadamente, se puede solucionar con un buen profesional; de modo que sí existen las personas tóxicas pero pueden dejar de serlo.

Cada vez que se tiene contacto con ellos, dejan un poso de duda, de miedo, de inseguridad, de malestar o de inquietud; en algunas ocasiones pueden llegar a anular a su víctima por completo. Si no queda más remedio que lidiar con una de estas personas es mejor no hacerles sombra ya que eso es una de las cosas que más temen. Ejercen su control con sus acciones y reacciones y también cuando no reaccionan en absoluto; a veces se valen de sutilezas, de olvidos, siempre tendrán alguna escusa a mano por no haber hecho algo o haberlo hecho siempre impregnado de algún residuo tóxico, serán cosas aparentemente insignificantes pero que actúan como el gota a gota – el conocido método de tortura psicológica que se llevaba a cabo en China - se valdrán de mensajes que hagan daño o que dejen perplejo, a veces su entrenamiento ha sido exhaustivo y pueden actuar consciente o inconscientemente. Mejor no esperar una palabra cálida sincera, ni un abrazo de amor sincero, incluso, a veces, hasta te negarán ‘un gracias’. Es posible que si necesitan cualquier cosa, digan algo amable, pero, prestando atención, es fácilmente observable que no hay sinceridad en sus palabras.

Alejarse de una persona tóxica, a veces, no es fácil, ya que en muchos casos, estamos hablando de una madre, de un padre, un hijo, un cuñado, un amigo, un jefe, un profesor o de la propia pareja. Naturalmente, también pueden darse más de uno de estos personajes en la vida de un individuo al mismo tiempo, pero, no hay que desesperar porque, habitualmente, hay solución: no se pueden controlar las reacciones de las personas pero cada persona puede controlar las propias, y, si es posible, lo mejor es distanciarse.

El mundo está lleno de personas maravillosas, protectoras, con capacidad de amar, de respetar, de cuidar y de honrar; el universo rebosa de personas nobles, con cualidades excelentes. Recomiendo no perder el tiempo, la energía, la alegría, la confianza en uno mismo - la vida cada vez es más corta y no hay que olvidar que lo más importante de la vida es la propia vida.

Es curioso que las personas que no han sido amadas en su niñez por alguno de sus padres, en la edad adulta ‘se busquen’ - inconscientemente - personas de ese mismo perfil, para de alguna manera, ‘resolver’ las carencias emocionales, esa sensación de ‘cojera’ emocional que les ha acompañado durante toda la vida.

Si alguien se ve como persona tóxica y quisiera dejar de serlo para que su vida sea fluida y positiva, no lo dudes, ponte en contacto conmigo, yo te puedo ayudar. La confidencialidad y el Código Deontológico forman parte de la absoluta responsabilidad y respeto hacia el cliente.

"I am an optimist. It does not seem to be much use being anything else." Winston Churchill

Las sesiones pueden tener lugar vía Skype.