martes, 21 de octubre de 2014

Soledad en pareja

Vivir en pareja no implica que, si existe sensación de soledad, esta se vaya a desvanecer. Ha sido demostrado que un 20% de las individuos casados o que viven en pareja, siguen sintiéndose solos y el número incrementa, a medida que aumenta la edad.

Muchas personas que se encuentran solas piensan que el hecho de casarse o tener una pareja acabará con esa sensación de vacío, pero, ese no suele ser el caso, ya que estamos hablando de una percepción subjetiva. La soledad en pareja suele tener lugar lentamente, la comunicación va deteriorándose con el tiempo – a veces, relativamente poco tiempo. Las conversaciones se van mecanizando, se cae en la rutina, el distanciamiento emocional cada vez es mayor y dejan de compartirse intereses.

Se pierde la complicidad y el amor, quedando atrapados en un vínculo anodino, pero, por miedo a, precisamente, quedarse solos, se mantiene tal cual, condenándose a si mismos, a sentir la soledad que se intentaba evitar.

¿Cómo se puede cambiar la situación?

Iniciando conversaciones que no sean meramente mecánicas: “Te toca ir a recoger al los niños” o “Hay que llevar el coche a revisión”. Preguntar por el punto de vista de algo importante y escuchar atentamente, validando la opinión que se está dando, puede ser un buen comienzo.


Compartiendo experiencias, aunque tenga que hacer un esfuerzo.   


Siendo empático. Es muy normal, en todo tipo de relaciones, la presunción de que se conoce – perfectamente - a la otra persona, que se sabe lo que piensa y que se sabe lo que siente, cuando, en realidad, no se tiene la menor idea. No debe darse nada por sentado, preguntar para averiguar que es lo que realmente está pasando, es esencial para comprender verdaderamente a la pareja, ya que crecerá el nivel de empatía y el vínculo afectivo se renovará.


Se trata de un proceso, no de un evento, por lo tanto, la paciencia será un ingrediente indispensable. Si necesitas ayuda porque deseas aprender, desaprender, reaprender, o, simplemente, agilizar el proceso, yo te puedo ayudar.

(Las sesiones de una hora, vía Skype, tienen un coste de 20 Euros)